Voy a ser exageradamente honesto..
la mayoría de los cristianos leen la Biblia como si fuera un libro de autoayuda.
Buscan versículos motivadores, los usan como parches emocionales y esperan que mágicamente sus problemas desaparezcan.
Pero cuando la crisis sigue ahí, vienen las dudas..
¿Por qué Dios no me responde?
Aquí está la verdad que pocos quieren escuchar:
la Biblia no es un amuleto ni un libro de frases bonitas.
Es un manual de vida que, si no lo interpretas correctamente, no sirve de nada.
No puedes aplicar lo que no entiendes.
Y ese es el problema real.
Muchos citan versículos fuera de contexto y luego se preguntan por qué nada cambia.
La Biblia tiene poder,
sí,
pero solo cuando la aplicas como Dios la diseñó,
no como a ti te conviene.
Si de verdad quieres soluciones reales para tus problemas, necesitas aprender cómo interpretar correctamente la Biblia y cómo aplicarla de forma práctica y efectiva.
No se trata de repetir promesas sin sentido, sino de entender qué dice Dios en su totalidad y cómo eso transforma tu manera de actuar, pensar y decidir.
Aquí es donde entra la hermenéutica bíblica.
Sin ella, te quedarás estancado en la superficie y nunca verás resultados.
¿Quieres respuestas reales?
Entonces necesitas estudiar la Biblia de manera seria y profunda.
¿vas a seguir aplicando la Biblia a medias o vas a aprender a usarla como Dios quiere?