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Cómo Enseñar la Biblia en Casa: Guía para Padres Cristianos

Foto del escritor: Charly CountryCharly Country

¿Te has preguntado alguna vez si realmente estás haciendo todo lo que deberías para enseñar a tus hijos la Biblia?


La verdad es que, por más que te duela, la mayoría de los padres cristianos fallan miserablemente en esta tarea.


Y no, no me refiero a que no les hables de Jesús o no los lleves a la iglesia.


Hablar de la Biblia no es suficiente.


Necesitas vivirla en tu hogar, y eso es algo que muchos pasan por alto.


La idea de “enseñar la Biblia en casa” es algo que suena bien en teoría, pero cuando se trata de llevarlo a la práctica, muchos padres se pierden en el proceso.


Y sí,


lo sé,


la vida está ocupada.


Tienes trabajo, compromisos, y la última cosa en tu mente es sentarte a leer la Biblia con tus hijos.


Pero si no haces esto ahora, cuando tus hijos sean mayores, lo lamentarás profundamente.


Es ahora o nunca.






1. Hazlo Personal, No Abstracto


Este es un error enorme.


Muchas veces, los padres intentan enseñar la Biblia de una manera tan abstracta que los niños simplemente no la entienden.


La Biblia no es solo un libro de historias lejanas y aburridas; es algo personal, algo que les habla directamente a ellos. La clave está en llevar las enseñanzas a su nivel.


Habla de las historias en términos de lo que significan para ellos, no de lo que significaron en tiempos antiguos.


Por ejemplo, la historia de David y Goliat no es solo para "sabios guerreros" de antaño.


Enseña a tu hijo que, al igual que David, él puede enfrentar cualquier gigante en su vida, ya sea un examen difícil, una situación en la escuela o un problema con amigos.


Eso es lo que realmente queda en su mente: cómo la Biblia se aplica a su vida cotidiana.






2. Hazlo un Habito Diario, No un Evento Especial


La enseñanza de la Biblia no puede ser solo un "evento" el domingo o en días festivos.


Si realmente quieres que tus hijos crezcan con una comprensión sólida, tienes que hacerlo parte de la rutina diaria. No me importa si es solo un versículo en la mesa de desayuno o un momento antes de dormir.


Si la Biblia no está presente cada día, será más difícil para tus hijos entender que es algo relevante.






3. No Temas a los Grandes Temas


La Biblia no es solo para tiempos fáciles.


De hecho, lo que más falta en muchas casas cristianas es el valor de hablar de los temas difíciles.


¿Por qué tememos hablar de la justicia de Dios, del pecado y de la salvación? 


Estas son las cuestiones que tus hijos van a enfrentar en el mundo exterior. No puedes esconderlas debajo de la alfombra. Al contrario, debes hacer de esos temas un punto de conversación normal.


Explicarles sobre el pecado, la gracia y la redención es una de las mayores responsabilidades que tienes como padre cristiano.






4. Hazlo Relacional, No Solo Educacional


La enseñanza de la Biblia no debe ser solo un proceso de "información".


Debe ser una relación.


Si solo lees versículos y hablas de ellos como si fueran datos en una prueba, estás perdiendo el propósito.


La Biblia es más que solo enseñanza intelectual; es una invitación a una relación con Dios. Si no logras que tus hijos sientan esa conexión, de nada sirve que les enseñes las historias.


Lo que estás haciendo es sembrar semillas, y para que estas crezcan, necesitan algo más que solo conocimiento. Necesitan sentir a Dios en sus vidas.






5. Sé el Ejemplo: Predica con Hechos, No Solo con Palabras


Este es el golpe de realidad que muchos padres evitan:


¿Qué tanto vives tú lo que les enseñas? 


No importa cuánto le digas a tu hijo que debe orar, si nunca te ve rezando, no entenderá el valor de esa práctica. La Biblia no se trata solo de predicar, se trata de vivirla todos los días.


Si te dicen que la Biblia es importante, pero ven que nunca abres las Escrituras, tu enseñanza se convierte en una contradicción.


¿Qué ejemplo estás dando?






6. La Disciplina Es Parte del Proceso


Este es otro punto que muchos cristianos prefieren ignorar, pero la disciplina es parte integral de enseñar la Biblia.


¿Qué quieres enseñar a tus hijos si no les enseñas lo que está bien y lo que está mal según la palabra de Dios?


La corrección no es algo que debas temer.


El amor y la disciplina deben ir de la mano.


Si no eres disciplinado en la forma en que enseñas a tus hijos sobre el pecado, la obediencia y el perdón, estás abriendo la puerta para que ellos se desvíen del camino cristiano.






Conclusión: No Hay Excusas


La realidad es que enseñar la Biblia en casa no es opcional.


Si no lo haces tú, el mundo lo hará por ti.


Te guste o no, estás formando la próxima generación.


No puedes permitirte ser un padre pasivo cuando se trata de la fe.


Si no tomas en serio la educación espiritual de tus hijos ahora, lo lamentarás más tarde.


La fe cristiana no se transmite por defecto; se transmite por ejemplo, por enseñanza activa y, sobre todo, por amor.






Si lo que lees te resuena y estás listo para dar un paso más allá en la enseñanza bíblica, te invito a que comiences ya a interpretar la Biblia correctamente.  


No esperes más.

¿Estás listo? 

te aviso, solo los valientes se atreven..

es aquí:

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