El problema: Estás leyendo la Biblia mal
Si crees que puedes abrir la Biblia, leer un versículo y aplicarlo a tu vida sin más, te tengo malas noticias: estás interpretando mal la Escritura.
Y sí, eso significa que probablemente has creído en muchas mentiras.
La Biblia no es un libro cualquiera. Es un texto milenario escrito en distintos idiomas, para distintas culturas y en contextos históricos específicos.
Interpretarla sin conocer estos factores es como intentar entender un contrato legal en chino sin traducción.
Si no quieres seguir cayendo en errores bíblicos garrafales, sigue leyendo.
1. Contexto, contexto, contexto
El mayor error que comete la gente es leer la Biblia sin considerar su contexto histórico y cultural.
Cada libro fue escrito en una época distinta, con propósitos específicos y para audiencias particulares.
Ejemplo: Filipenses 4:13
"Todo lo puedo en Cristo que me fortalece".
¿Significa que puedes ganar la lotería o convertirte en millonario?
No.
Pablo hablaba de aprender a estar contento en cualquier circunstancia, sea en pobreza o abundancia.
Si no entiendes el contexto, estás leyendo mal.
2. No todos los pasajes son para ti (y eso duele)
Otro error común es asumir que cada versículo está dirigido a ti directamente.
No, no todo es aplicable a tu vida moderna.
Ejemplo: Jeremías 29:11
"Porque yo sé los planes que tengo para ustedes...".
¿Sabías que esto fue dicho específicamente a los israelitas exiliados en Babilonia y no a ti directamente?
Claro, puedes encontrar principios generales, pero no es una promesa personalizada.
3. La Biblia no se contradice (tú la lees mal)
Muchas personas afirman que la Biblia se contradice, pero el problema no es la Biblia, sino la falta de una buena interpretación.
Si ves una "contradicción", es porque te falta contexto o conocimientos lingüísticos.
Ejemplo: Santiago dice que "la fe sin obras es muerta", mientras que Pablo dice que "somos salvos por fe, no por obras".
¿Contradicción?
No.
Pablo hablaba de la salvación, Santiago de la evidencia de esa salvación.
4. Aprende griego y hebreo (o al menos consulta buenas fuentes)
Las traducciones, por más buenas que sean, siempre pierden matices del idioma original.
Si realmente quieres profundizar, usa herramientas como interlineales, diccionarios bíblicos y comentarios de expertos.
Ejemplo: "Amor" en griego tiene múltiples palabras: agape (amor incondicional), fileo (amor de amistad), eros (amor romántico).
Si no sabes esto, podrías malinterpretar muchos pasajes.
5. No dependas de un pastor para entender la Biblia
Sí, lo dije.
Deja de depender de lo que un predicador dice cada domingo y aprende a estudiar por ti mismo.
Hay pastores fieles, pero también hay muchos que manipulan la Biblia para sus propios intereses.
Si sigues dependiendo de otros para que "te expliquen" la Escritura, siempre serás vulnerable a interpretaciones erróneas y manipulaciones.
6. La solución: Aprende a interpretar la Biblia correctamente
Si estás cansado de depender de otros y quieres descubrir la verdad sin filtros ni manipulaciones, necesitas aprender interpretación bíblica por ti mismo.
Por eso, te enseñaré cómo analizar la Biblia en su contexto histórico, lingüístico y cultural.
No más errores.
No más engaños.