Si alguna vez has sentido que el mundo entero está en tu contra, este salmo es para ti.
David escribió esto cuando su propio hijo, Absalón, se había rebelado contra él.
Imagínate: traicionado por tu propia sangre, con enemigos por todas partes, y aun así, él no se quebró.
¿Su secreto?
Una confianza brutal en Dios.
El Salmo 3
¡Oh Jehová, cuánto se han multiplicado mis adversarios! Muchos son los que se levantan contra mí.
Muchos son los que dicen de mí: No hay para él salvación en Dios. Selah
Mas tú, Jehová, eres escudo alrededor de mí; Mi gloria, y el que levanta mi cabeza.
Con mi voz clamé a Jehová, Y él me respondió desde su monte santo. Selah
Yo me acosté y dormí, Y desperté, porque Jehová me sustentaba.
No temeré a diez millares de gente, Que pusieren sitio contra mí.
Levántate, Jehová; sálvame, Dios mío, Porque tú heriste a todos mis enemigos en la mejilla; Los dientes de los perversos quebrantaste.
La salvación es de Jehová; Sobre tu pueblo sea tu bendición. Selah
¿Quién Dijo Que Dios No Te Responde?
Este salmo es un grito de guerra contra el miedo.
estaba rodeado, su vida pendía de un hilo, pero él decidió confiar en Dios en lugar de hundirse en la desesperación.
Los enemigos siempre hablarán basura
“No hay salvación para él en Dios”, decían. ¿Te suena familiar? Siempre hay alguien diciéndote que no hay salida, que Dios no hará nada. Pero ellos no son Dios, así que ignóralos.
Dios es tu escudo, no tu último recurso
David no pidió que Dios se le apareciera con un milagro instantáneo. Él ya sabía que Dios lo protegía, y esa seguridad le daba paz en medio del caos.
Dormir en medio de la guerra: La verdadera confianza
Mientras otros temblaban, David dormía tranquilo. No porque fuera insensible, sino porque sabía que Dios tenía el control. ¿Tú puedes dormir así o sigues viviendo en ansiedad?
La victoria viene de Dios, no de tu estrategia
David no le pidió a Dios que le diera un plan para escapar, le pidió que actuara. Y Dios no solo lo salvó, sino que humilló a sus enemigos.
¿Cómo Aplicarlo a Tu Vida?
Deja de escuchar a quienes dicen que Dios no te ayudará. Esa gente no tiene autoridad sobre tu vida.
Confía en que Dios es tu escudo, incluso cuando no veas salida. No necesitas pruebas visibles para saber que Él está contigo.
Duerme en paz. Si David pudo descansar en medio de una persecución mortal, ¿qué excusa tienes tú para vivir en ansiedad?
Deja la pelea en manos de Dios. Tú no tienes que vengarte ni probar nada. Dios se encargará de cerrar bocas.
¿Realmente Confías en Dios o Solo Cuando Te Conviene?
Este salmo no es para cristianos tibios.
Es un desafío a confiar en Dios incluso cuando todo parece perdido.
Si todavía vives con miedo y ansiedad, tal vez sea porque no has aprendido a descansar en Su promesa.
Si quieres aprender a interpretar la Biblia de verdad, con todo su poder y sin filtros religiosos, te invito a comenzar ya.
Porque la fe que no se entiende, no se aplica.