¿Seguro que entiendes bien a Jesús?
Muchas personas citan palabras de Jesús sin tener idea de lo que realmente dijo. No porque tengan malas intenciones, sino porque han heredado interpretaciones erróneas, manipulaciones religiosas o simplemente leen traducciones deficientes.
Hoy vamos a desmantelar las frases más malinterpretadas de Jesús revisando los textos originales.
1. “No juzguéis, para que no seáis juzgados”
(Mateo 7:1)
¡El versículo favorito de quienes no quieren que nadie les diga nada! Lo usan para callar cualquier corrección, pero ¿es eso lo que Jesús quiso decir?
Lo que realmente dijo:
En el griego original, Jesús no prohibía juzgar, sino hacerlo con hipocresía. El contexto deja claro que primero debes corregirte a ti mismo antes de señalar a otro. (Mateo 7:5).
Conclusión:
Jesús no dijo que nunca juzgues; dijo que lo hagas correctamente.
2. “Donde dos o tres se reúnen en mi nombre, allí estoy yo”
(Mateo 18:20)
¿Significa que Jesús solo está presente si hay un mínimo de dos personas?
¿Y qué pasa cuando oras solo?
Lo que realmente dijo:
El contexto trata sobre disciplina eclesiástica, no sobre reuniones de oración. Jesús está enfatizando que cuando se toman decisiones en su nombre, Él respalda la autoridad de la iglesia.
Conclusión:
Jesús está con los creyentes siempre, no solo cuando hay dos o tres.
3. “Pide y se te dará”
(Mateo 7:7)
Muchos lo interpretan como un cheque en blanco divino: pides lo que quieras y Dios te lo da. Pero ¿es eso lo que Jesús enseñó?
Lo que realmente dijo:
Jesús hablaba de buscar activamente la voluntad de Dios, no de exigir caprichos. En el griego, los verbos implican una acción continua: seguir pidiendo, seguir buscando, seguir llamando. No es una garantía de recibir cualquier cosa, sino de recibir lo que está alineado con la voluntad divina.
Conclusión:
No, Jesús no prometió concederte cualquier deseo.
4. “El reino de Dios está dentro de vosotros”
(Lucas 17:21)
Algunos afirman que Jesús enseñó que el reino de Dios es solo algo interno, una experiencia espiritual subjetiva. Pero ¿es así?
Lo que realmente dijo:
En el griego, la frase también puede traducirse como “entre vosotros”, refiriéndose a la presencia misma de Jesús entre los fariseos que lo interrogaban.
Conclusión:
Jesús hablaba de su propia presencia como la manifestación del reino, no de un misticismo interior.
¿Listo para aprender a interpretar la Biblia sin manipulaciones?
Si después de esto te das cuenta de que podrías haber estado malinterpretando las palabras de Jesús, no te preocupes.
Estás a tiempo de aprender a hacerlo bien.
Por eso, te enseñaré paso a paso cómo analizar la Escritura sin manipulaciones.
¡Descubre la verdad que nadie te ha enseñado!