¿Tu Dinero es Tu Dios?
La historia del joven rico es una de las más incómodas del Evangelio.
Un hombre que parecía tenerlo todo: juventud, riqueza y un historial impecable de obediencia a la ley.
Sin embargo, cuando se acercó a Jesús preguntando qué más debía hacer para heredar la vida eterna, no esperaba que la respuesta lo dejara devastado:
"Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme." (Mateo 19:21)
Pero el joven se fue triste.
¿Por qué?
Porque su riqueza era su verdadera seguridad, no Dios.
¿Cuál es el Verdadero Problema Aquí?
Muchos interpretan este pasaje pensando que Jesús quiere que todos renuncien a sus bienes materiales, pero no se trata de pobreza vs. riqueza.
El verdadero problema es ¿qué tiene el control de tu corazón?
¿Podrías soltarlo todo por seguir a Cristo?
¿O hay algo que valoras más que a Dios?
La riqueza, cuando se convierte en el centro de tu vida, te ata y te impide avanzar espiritualmente.
Jesús no está diciendo que ser rico sea malo, sino que si el dinero es tu prioridad, jamás podrás ser verdaderamente libre.
¿Eres Dueño del Dinero o Él es Dueño de Ti?
El joven rico quiso negociar con Dios.
Pensó que con solo seguir unas reglas y no hacer "cosas malas" era suficiente.
Pero Jesús le mostró que el verdadero discípulo requiere entrega total.
Y aquí viene la gran verdad que muchos no quieren escuchar: El dinero no es el problema.
El problema es cuánto poder le das en tu vida.
¿Te aterra perderlo?
¿Te sientes más seguro con dinero en el banco que con fe en Dios?
¿Tomas decisiones basadas en lo que dice tu billetera y no en lo que dice la Biblia?
Si te identificas con esto, es hora de aprender a interpretar la Biblia correctamente.
Porque si la lees con la mentalidad equivocada, podrás justificar cualquier cosa, incluso tu propia esclavitud al dinero.
No Interpretes la Biblia a tu Manera
Muchos usan este pasaje para demonizar la riqueza o, por el contrario, para justificar su avaricia.
Ambas interpretaciones están erradas.
Y es que, sin las herramientas adecuadas, cualquiera puede torcer la Escritura para acomodarla a su conveniencia.
Por eso, si realmente quieres conocer lo que la Biblia enseña sobre el dinero y cómo aplicarlo a tu vida, tienes que aprender a Interpretar la Biblia correctamente.
Deja de leer la Biblia con prejuicios y distorsiones.
Descubre la verdad.