Hablemos claro: Dios no te llamó a ser víctima de nadie.
Si alguien te ha dicho que debes soportar abuso "porque la Biblia dice que el amor todo lo soporta",
te han mentido.
La Escritura nunca justifica el maltrato ni la esclavitud emocional.
Dios condena la opresión
En Salmos 11,5, se nos dice que el Señor aborrece a quien ama la violencia.
No importa si viene de una pareja, un familiar o un líder religioso: el abuso no es de Dios.
El amor no daña
1 Corintios 13,4-7 habla de un amor que edifica, no que destruye.
Si tu relación te hace sentir pequeño, culpable o sin valor, no es amor, es control.
Jesús enseñó a poner límites
En Mateo 10,14, Jesús mismo dice que si no te reciben ni te escuchan, te sacudas el polvo y sigas adelante.
Si Él no toleró el rechazo sin actuar, ¿por qué deberías aguantar el maltrato?
Eres templo del Espíritu Santo
1 Corintios 6,19 deja claro que tu vida tiene valor.
Permitir que otro te destruya es ir en contra de lo que Dios dice de ti.
Salir no es fácil, pero es necesario.
Dios te quiere libre, no encadenado al sufrimiento.
Busca ayuda - No estás solo. Habla con alguien de confianza que pueda apoyarte.
No justifiques el abuso - Dios nunca te pediría que te quedes donde están destruyendo tu alma.
Aprende a interpretar la Biblia correctamente - Muchos se aprovechan de la ignorancia bíblica para manipular a otros. No seas víctima de malas interpretaciones.
Tu libertad comienza con la verdad.