Vamos a ser sinceros, muchas personas se han hecho esta pregunta:
“¿Realmente los evangelios se contradicen entre sí? ¿Cómo puede ser que cuatro relatos sobre la vida de Jesús tengan detalles diferentes?”.
Esta es la pregunta que muchos escépticos lanzan para tratar de socavar la autenticidad de la Biblia.
Y lo peor de todo: muchos creyentes también se sienten confundidos, sin saber qué pensar.
Pero, ¿acaso te has detenido a pensar que las "contradicciones" que observas en los evangelios no son más que malentendidos?
Las discrepancias no son sinónimo de contradicción. Y, en realidad, es justo lo contrario: los evangelios no se contradicen, se complementan.
No sé si te has dado cuenta, pero la riqueza de estos relatos, aunque parecen tener diferencias, en realidad demuestran la autenticidad de los testimonios.
¿Diferentes Perspectivas? Claro que sí.
El Evangelio de Mateo, Marcos, Lucas y Juan no fueron escritos con la misma perspectiva ni por las mismas personas.
Esto no solo es natural, sino completamente lógico.
Si cuatro personas estuvieran viendo el mismo evento desde diferentes ángulos, ¿te sorprendería que sus relatos tuvieran énfasis distintos?
Claro que no.
Cada evangelista escribió con un propósito específico y a un público diferente.
Mateo, por ejemplo, escribió para judíos, mientras que Lucas se dirigió a los gentiles. Juan escribió con un enfoque mucho más teológico y profundo sobre la divinidad de Jesús.
Así que las “diferencias” que vemos en sus relatos son, en realidad, detalles que enriquecen el entendimiento del evangelio en su totalidad.
¿Es el Testimonio de Varios Testigos un Problema?
¿Sabías que si los evangelios fueran exactamente iguales, eso en realidad sería sospechoso?
Piensa en ello.
Si los cuatro autores hubieran copiado las mismas palabras y detalles de manera idéntica, te habría sonado a mentira, no a verdad.
La autenticidad de un testimonio se ve en las pequeñas diferencias que, al ser combinadas, revelan una historia coherente y completa. Y eso es lo que tenemos con los evangelios: cuatro testimonios únicos que dan cuenta de la vida y enseñanzas de Jesús.
¿Te atreves a profundizar?
Si realmente quieres entender cómo los evangelios no solo no se contradicen, sino que se completan perfectamente, es hora de que te adentres en un verdadero estudio bíblico.
¿Cómo puedes leer la Biblia sin interpretar bien estos detalles?
¡Es crucial!
No dejes que los mitos sobre las “contradicciones” te alejen de lo que realmente dice la Palabra de Dios.