Te han contado la historia mil veces:
Jesús murió, resucitó y…
¿después qué?
Aquí es donde la mayoría de los cristianos se queda en blanco.
Se enfocan tanto en la cruz y la tumba vacía que ignoran lo que pasó después.
Y créeme, lo que ocurrió después de la resurrección es tan impactante que cambiará por completo tu perspectiva.
1. Se apareció a más de 500 personas
¿Te imaginabas que Jesús no solo se apareció a sus discípulos, sino también a una multitud?
1 Corintios 15:6 menciona que más de 500 personas lo vieron con sus propios ojos.
¡500 testigos!
Y algunos seguían vivos cuando Pablo escribió esto.
Así que no, la resurrección no fue un truco ni una alucinación colectiva.
2. Comió y bebió con sus discípulos
Si crees que Jesús resucitó como un fantasma flotante, estás muy equivocado.
Lucas 24:42-43 relata que comió pescado frente a sus discípulos.
¿Para qué?
Para demostrar que su resurrección era física, real.
Nada de un espíritu etéreo.
Su cuerpo glorificado era tangible, pero a la vez sobrenatural.
3. Desafió el tiempo y el espacio
Aquí es donde las cosas se ponen realmente interesantes.
Jesús resucitado entraba en lugares cerrados sin necesidad de abrir puertas (Juan 20:19).
Su cuerpo tenía capacidades que desafían nuestra comprensión.
¿Te das cuenta de lo revolucionario que es esto?
Un cuerpo transformado que anticipa lo que los creyentes recibirán en la eternidad.
4. Ascendió al cielo y prometió regresar
Después de 40 días en la tierra, Jesús ascendió al cielo ante los ojos de sus discípulos (Hechos 1:9-11).
Pero aquí está lo crucial: NO se fue para siempre.
Prometió volver.
Y si crees en la Biblia, sabes que su regreso no será con abrazos y flores, sino con juicio y gloria.
¿Estás listo para ese día?
Ahora dime, ¿sigues pensando que la historia de Jesús termina en la tumba vacía?
Lo que ocurrió después es incluso más impactante.
Pero aquí está el problema: si no interpretas bien la Biblia, te perderás los detalles que cambian todo.
Si quieres aprender a estudiar la Escritura como realmente debe ser entendida, tienes que comenzar ya.
No te conformes con lo que siempre te han dicho. Profundiza, cuestiona y descubre la verdad que pocos se atreven a explorar.
Porque entender la Biblia no es opcional, es urgente.